Su nombre es Samsung Blue Earth, un móvil que lleva integrado un panel solar en su parte trasera que permite a los usuarios generar energía suficiente para utilizar el dispositivo en cualquier lugar y momento. Además, el cargador eléctrico de este teléfono tiene cinco estrellas en eficiencia energética y sólo consume 0,03 vatios en modo de espera. La autonomía de llamada de este dispositivo es de 250 minutos en modo llamada y hasta 300 horas en modo espera.
Pese a que en el mercado han aparecido modelos que buscaban la consideración de teléfonos ecológicos en los últimos años, el director de Telecomunicaciones de Samsung, Celestino García, subraya que "hasta ahora, los llamados teléfonos móviles ecológicos no iban más allá de dispositivos con reducción del consumo energético y funciones muy limitadas". García añade que este terminal "es responsable con el medio ambiente en todas las fases: desde su fabricación hasta el propio uso".
Además de ser ecológico, el Blue Earth tiene acceso a la última tecnología de redes móviles (3G) y conectividad Wi-Fi. Al igual que los modelos más modernos de los principales fabricantes, este terminal de Samsung incorpora una pantalla táctil de 3 pulgadas, algo más pequeña que la que tienen modelos tan populares como el iPhone de Apple (3,5''), la Storm 9500 de Blackberry (3,2'') o el Nexus One de Google (3,7'').
Su reducido tamaño permite a este teléfono tener un peso más ligero que sus competidores. El Blue Earth pesa 119 gramos, por debajo de los 135 gramos de media que pesan otros modelos en el mercado, como los citados anteriormente.
Además, ha sido elaborado con materiales extraídos de botellas de agua ya usadas que se utilizan para reducir el consumo de combustibles y disminuir las emisiones de carbono durante el proceso de fabricación. A este tipo de materiales se les denomina Materiales de Cambio de Fase (MCF).
El embalaje con el que se comercializa el dispositivo también tiene el sello de ecológico. Proviene de papel reciclado y para su impresión se ha utilizado tinta de soja. Y una vez desembalado el teléfono, la caja se puede reutilizar como marco fotográfico o estuche para lápices.
Ecológico por fuera y por dentro
Pero las características ecológicas no se limitan tan sólo a su aspecto físico. Su software viene con una interfaz que intenta sensibilizar la importancia de respetar el medio ambiente. Dispone de un "Modo Ecológico" con el que el usuario puede ajustar mediante un sólo clic el brillo de la pantalla, la duración de la retroiluminación y el acceso mediante Bluetooth para ahorrar energía. También incorpora la función "Eco Walk", con la que el usuario puede contar sus pasos con un podómetro incorporado y calcular la reducción de emisiones de CO2 cuando paseamos y no utilizamos un vehículo a motor.
En cuanto a opciones multimedia, el Blue Earth lleva consigo una cámara de 3,2 megapíxeles, con la opción de grabación de vídeo incluida, reproductor de música y vídeo, radio FM, auriculares Bluetooth. Además, tiene una capacidad de memoria interna de 130 megas y la posibilidad de añadir una tarjeta de memoria externa micro SD de hasta 16 GB.
Para aquellos que quieran disfrutar de un teléfono móvil de última generación y que al mismo tiempo sea respetuoso con el medio ambiente, el Blue Earth aparece como mejor opción. Vodafone comercializa este terminal en exclusiva y los precios van desde los 59€ para nuevas altas y portabilidades y desde 89 euros y 3000 puntos para los clientes de esta operadora.
Fuente:www.expansion.com
